LA NECRÒPSIA DE LA SETMANA:
HISTORIA CLÍNICA:
Especie canina,
Pastor Alemán, 9 años, macho.
Antecedentes de alteración del
comportamiento y episodios aislados de agresividad desde hace 1,5
meses.
Durante este tiempo ha sufrido
dos crisis convulsivas.
La analítica convencional,
pruebas radiológicas torácicas y la ecografía abdominal son
normales.
Resonancia magnética nuclear (RMN):
se detectó una masa anormal de unos 3 x 2,5 cm aproximadamente
localizada en el lóbulo olfatorio y en el área frontal derecha:
sección sagital (Imagen 1); sección dorsal
(Imagen 2). Aparentemente es una lesión bien delimitada
(*).
Diagnóstico
clínico:
neoplasia
intracraneal.

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MACROSCOPÍA:
Externamente no se aprecian
lesiones aparentes
(Imagen 3).
A la apertura de la cavidad
abdominal se observan bazos ectópicos asociados al epiplón.
No se apreciaron otros
hallazgos significativos en el examen de la cavidad abdominal.
Tampoco se observaron lesiones aparentes en el examen de la
cavidad torácica.
A la apertura
de la cavidad craneana y durante la extracción del encéfalo se
observó una masa de unos 2 x 4 cm aproximadamente en la zona del
bulbo olfatorio derecho. Tenía consistencia blanda y comprimía y
deformaba el encéfalo adyacente. Tras la extracción del encéfalo
la masa descrita permaneció adherida a la base del cráneo
(Imagen 4).
La existencia de dicha masa en la base del cráneo provocaba la
compresión del parénquima nervioso del lóbulo olfatorio derecho
dejando una especie de "huella" del tumor en la zona afectada
(Imagen 5).
Los cornetes
nasales no parecían afectados macroscópicamente (Imagen 6).
Una vez fijado el encéfalo en formaldehído se procedió a la
sección seriada del mismo, confirmándose la apreciación inicial de
que la lesión del encéfalo era mayoritariamente por compresión, si
bien no podía eliminarse la posibilidad de algún grado de
infiltración del parénquima nervioso adyacente por la
proliferación neoplásica
(Imágenes 7 y 8). La citada masa se extendía por la
basa del encéfalo desde el lóbulo olfatorio derecho hasta el
quiasma óptico.
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MICROSCOPÍA:
Sistema nervioso central: la masa
observada macroscópicamente consistía en una proliferación densa
de células irregulares y basófilas, con núcleo hipercromático
evidente y escaso citoplasma (Imágenes 9 y 10).
Tales células se disponían
predominantemente en forma de masas sólidas, pero también formando
"pseudo-rosetas" alrededor de capilares, vénulas y arteriolas
(Imágenes 9 y 10). Se apreciaban también áreas múltiples de
necrosis y abundantes células de Gitter y gemistocitos. En general
se trataba de una proliferación muy vascularizada de índice
mitótico significativo (2-4/campo a 40x) y relativamente
bien delimitada del neurópilo adyacente, si bien también se observaba un
leve grado de infiltración en los márgenes.
En el resto de la substancia
nerviosa del encéfalo se aprecian algunas áreas dispersas de
picnosis neuronal, espongiosis de la substancia blanca e imágenes
de degeneración walleriana de fibras nerviosas. No obstante se
trata de hallazgos más bien inespecíficos cuya importancia
clínico-patológica es incierta.
No se observaron
otras lesiones aparentes en el estudio microscópico de la
necropsia. |

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ESTUDIOS COMPLEMENTARIOS
Proteína
ácida fibrilar glial
(GFAP):
se observa inmunotinción
positiva sólo en el remanente de substancia nerviosa normal dispersa por
entre la proliferación tumoral.
Proteína
S-100
(S-100):
resultado negativo.
Citoqueratina
(CK):
las células neoplásicas que componen
las pseudo-rosetas son positivas.
Vimentina:
resultado
negativo.
Neurofilamentos
de 200KD (NF-200):
resultado negativo.
Enolasa
específica neuronal (NSE):
resultado negativo.
Hematoxilina
ácida fosfotúngstica (PTAH):
positividad en la parte apical de algunas células formadoras de
pseudo-rosetas.
DIAGNÓSTICO:
Tumor neuroectodérmico
primitivo con diferenciación
ependimaria.
COMENTARIO:
Esta neoplasia pertenece
al grupo de los Tumores Neuroectodérmicos Primitivos
(PNETs). Se incluyen
en este grupo las
neoplasias más indiferenciadas del sistema nervioso originadas a partir
de células embrionarias. Es muy poco frecuente en animales domésticos y
se han descrito casos en primates, bovinos y carnívoros domésticos de
diferentes edades. Las células progenitoras de los PNETs pueden
diferenciarse hacia las líneas celulares neuronal, ependimaria, glial y,
posiblemente, mesenquimatosa.
Para caracterizar los
subtipos de la neoplasia (su diferenciación) debe recurrirse a técnicas
inmunohistoquímicas y tinciones especiales.
En este caso, la positividad a CK indica el origen neuroectodérmico de
la población neoplásica. La negatividad a GFAP, S-100, NSE y NF-200
ponen de manifiesto la escasa diferenciación de las células neoplásicas,
descartando su naturaleza glial (S-100 y GFAP) o neuronal (NSE y NF-200).
La tinción especial PTAH evidencia la presencia de diferenciación
ciliar en el polo apical de las células que forman las
pseudo-rosetas.
En conclusión,
la positividad a CK y PTAH demuestra la diferenciación ependimaria de
dichas células.
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Idea: Mariano.Domingo@uab.es
Coordinació: .Alberto.Marco@uab.es
Disseny:
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